Durante meses «Gustavo» invirtió todo su capital en un proyecto de criptomoneda en el que confió. En Venezuela comenzó a comprar PancakeSwap (CAKE) cuando costaba menos de 6 dólares. Ocho semanas después, y ya con una cotización de 36 dólares, vendió todo. Las operaciones, aunque riesgosas, le dejaron una importante ganancia que decidió invertir nuevamente, pero esta vez en otro ámbito: el mercado inmobiliario.

El trader venezolano tenía en mente comprar una casa en Ciudad Bolívar, ubicada a unos 600 kilómetros al sureste de Caracas. Su intención era ofrecerle mejor calidad de vida sus a hijos. Sin embargo, había un problema. Todos los fondos los tenía en el exchange Binance, en la stablecoin Tether (USDT), y no conocía a ninguna inmobiliaria que aceptara bitcoin u otras criptomonedas como forma de pago.

La mayoría de los corredores inmobiliarios que consultó operaban a través de cuentas bancarias internacionales o divisas en efectivo. También conoció de casos en los que aceptaban transferencias en bolívares, la moneda nacional de Venezuela, aunque en una proporción mucho menor debido a la hiperinflación.

La opción de usar servicios bancarios fue descartada por el usuario al afirmar que, debido al monto de la transacción (unos 12.000 dólares), era probable que le bloquearan las cuentas. «Hay muchas restricciones bancarias con los montos en bolívares, además, iba a perderse mucho tiempo», añadió el comerciante.

«Un amigo me dijo que había una inmobiliaria que aceptaba criptomonedas como medio de pago. Averigüé y era cierto. Me puse en contacto con ellos para saber cómo podía hacerse la negociación. Ya al estar al tanto de todo, utilizamos nuestras cuentas de Binance para cerrar el trato», explicó «Gustavo» a CriptoNoticias.

El caso del trader es similar al de decenas de entusiastas de bitcoin (BTC), mineros de criptomonedas y hasta de jugadores de Axie Infinity quienes también están invirtiendo en el golpeado mercado inmobiliario de Venezuela. Se trataría de jóvenes que decidieron no emigrar y que estarían tomando ganancias en el actual mercado alcista de bitcoin.

Transacciones con bitcoin se mantienen en privado

Esta nueva realidad de comprar y vender viviendas con criptomonedas es conocida por la Cámara Inmobiliaria de Venezuela. Su presidente, Francisco López, dijo a CriptoNoticias que las operaciones con activos digitales están apareciendo cada vez más. El problema, según el ejecutivo, es que aún no son tan comunes y las que se hacen se mantienen en privado.

«Ahora mismo no tenemos capacidad para determinar cuántas operaciones se han hecho con criptomonedas. Usualmente son transacciones privadas que no se reportan. Creo que es un mundo por explorar, una ola que ha llegado a Venezuela. Vemos muchos avisos de agencias inmobiliarias que aceptan criptomonedas. Ese es otro tema importante, el de la capacitación de los corredores», resaltó López.

Uno de los problemas que tienen las transacciones de este tipo en el país es que no aparecen en la Ley de Arrendamiento ni en la Ley Contra las Estafas Inmobiliarias. Esa sería una de las razones por las que las operaciones con bitcoin o stablecoins se mantienen en privado entre las partes, el desamparo legal que existe. Otro punto es el tema de la seguridad y el hecho de que los registros nacionales solo aceptan documentos de compraventa denominados en bolívares.

Una operación con criptomonedas para comprar una vivienda se realiza de la siguiente forma: ambas partes pactan y realizan la transacción en las oficinas de la inmobiliaria. El comprador transfiere por Binance, por ejemplo, al vendedor en USDT. Posteriormente el comprador hace una segunda transacción para pagarle a la inmobiliaria su comisión.

Otra modalidad es que el comprador efectúa una transacción de reserva como compromiso de que va a ejecutar el negocio. Se trata de un porcentaje del costo de la vivienda como garantía para que la inmobiliaria comience a hacer el papeleo. La diferencia en el monto es pagada posteriormente al cerrar el trato.

Además, la inmobiliaria debe estar registrada en la Superintendencia Nacional de Criptoactivos y Actividades Conexas (Sunacrip) y reportar la transacción. El monto se asienta en bolívares en el documento de compraventa, pero es por un monto mucho menor. El acuerdo ha quedado establecido previamente en dólares digitales o bitcoin.

También hay casos en los que las partes acuerdan directamente, sin la participación de las inmobiliarias. En estos casos es posible que el comprador contrate a un abogado para elaborar los papeles correspondientes.

Desde el gremio inmobiliario de Venezuela están pidiendo que se modifique la ley para incluir operaciones en dólares, bitcoin y otras criptomonedas. De hecho, el Estado venezolano, en teoría, valida las operaciones en petros (PTR), más allá de las que se hacen con bolívares. No obstante, aquí habría otro obstáculo.

«Los registradores al ver que los documentos de compraventa están denominados en petros no los aceptan. Ellos entienden que las partes involucradas están usando petros para recibir dólares y asumen que se pueden meter en un lío, cosa que no es verdad. Por eso es importante la modificación de las leyes y la capacitación técnica», añadió López.

El propio presidente Nicolás Maduro se ha pronunciado sobre la compraventa de casas en dólares y dijo que eran ilegales. En noviembre del 2019 el mandatario anunció que las transacciones para la adquisición de viviendas, de vehículos o motos tenían legalidad si se hacían en petros, no en dólares u otras criptomonedas. Este decreto choca con lo que ocurre realmente en los registros.

Ganancias de Axie Infinity para comprar casas

Una de las razones que está incentivando la compraventa de viviendas con criptomonedas en Venezuela es Axie Infinity. El juego basado en tokens no fungibles (NFT) se ha transformado en la principal fuente de ingresos de decenas de personas en el país suramericano. Con la subida del mercado, los jugadores han amasado capitales que ahora buscan diversificar en bienes raíces.

De acuerdo con Carlos Grau, gerente de operaciones de la inmobiliaria Grau, ubicada en el estado Anzoátegui, en los últimos meses ha recibido llamadas de todo el país de jugadores de Axie Infinity. Las personas lo han contactado porque la empresa acepta pagos con criptomonedas y quieren información sobre cómo adquirir casas con las ganancias que han obtenido.

«Nos han llegado bastantes clientes. Muchos de ellos son jugadores de Axie Infinity que buscan casas o apartamentos. La mayoría maneja presupuestos que va entre los 7.000 y los 12.000 dólares en USDT. También hay traders o mineros que han mostrado interés en invertir», aseguró Grau.

El corredor inmobiliario señaló que, aunque la demanda para la compra de vivienda con criptomonedas ha subido, no lo ha hecho en la misma proporción la oferta disponible. En el caso de los compradores son jóvenes entusiastas del mundo digital, mientras que del lado de los vendedores se trata de personas que no están muy relacionadas con la tecnología y usualmente son de mayor edad.

Criptomonedas como fuente de ingreso

Debido a la crisis económica que experimenta Venezuela, miles de personas se han acercado a bitcoin y a otras criptomonedas como alternativa para el resguardo de valor. En la actualidad esta relación se ha magnificado con personas que no solo cambian sus bolívares por BTC, por ejemplo, sino que también hay un sector de la población que gana su salario en activos digitales.

Para el abogado y asesor inmobiliario Belman Andrés Abache, del Grupo Edaca Global, algunas personas están invirtiendo en Venezuela porque tienen como fuente de ingreso a las criptomonedas. El corredor explicó que los traders, los mineros, jugadores de Axie Infinity o personas que ganan en BTC, liquidan las ganancias de diferentes maneras.

«Muchos no tienen cuentas bancarias en el exterior y prefieren dejar sus fondos en los exchanges antes que cambiarlos a bolívares. Otros van canjeando a dólares en efectivo, pero la mayoría prefiere hacer las transacciones directamente en USDT desde Binance para lo que quieran comprar, ya sean casas o vehículos, por ejemplo», acotó el asesor.

Uno de estos casos fue reportado recientemente por CriptoNoticias cuando un joven trader pagó 12.000 dólares por una vivienda en Barcelona, ciudad ubicada a unos 350 kilómetros al Este de Caracas. El comerciante de bitcoin utilizó la stablecoin Tether para adquirir el inmueble que luego regaló a su mamá.

Venezuela es uno de los países con mayor adopción de criptomonedas en el mundo. El que los venezolanos estén utilizando activos digitales para comprar casas refleja el alcance que tiene el ecosistema bitcoiner y toda la industria que se mueve a su alrededor.